Este perchero resulta tan apropiado para el cuarto de costura, que cuando lo vi no pude resistir la tentación..., ¿verdad que es una monada?,


hoy estoy preguntona..., ¿recordáis el cajón de imprenta que compré en un mercadillo de Amsterdam?, lo tenía guardado a la espera de tener alguna pared libre para poderlo colgar..., le ha tocado por fin el turno, así de bonito luce en la nueva sala de costura, ahora habrá que ir rellenándolo de bordados mini...; la lista de proyectos va "in crescendo", esto no tiene fin..., lejos de ir cerrando frentes, los proyectos pendientes superan con creces a los finalizados, entre lo que se le ocurre a una cuando asalta la inspiración..., la cantidad de labores bonitas que se ven..., las preciosidades que mostráis en vuestros blogs..., no es que sean muchos ¡es que son interminables!, aburrimiento... ¿qué es eso?