MI BAÚL DE MATUSALÉN

Hoy os muestro un pequeño costurero antiguo, lo adquirí hace algún tiempo..., tengo que confesar que su estado era algo más bueno, al menos aparentemente, pero cuando adquiero algo antiguo no puedo evitar limpiarlo para quitar la mugre que ha dejado el paso del tiempo..., es muy probable que reste sabor antiguo a la pieza en cuestión, pero me parece una maniobra necesaria aunque sea tan sólo por asepsia..., con lo cual y pese a que lo hice con esmero cuidado, me llevé porquería, pero también algo del material con el que está forrado, cosas que pasan... ¡no se puede ser maniática!

El interior está forrado en seda y terciopelo y lleva un espejito en la tapa, está completo y consta de diversos útiles de costura: tijeras, dedal, guarda-agujas, punzón, ganchillo, una especie de cutter y un gancho que creo servía para facilitar las botonaduras.

En algunas ocasiones me habéis preguntado ¿dónde encuentro estas maravillas...?, a veces topo con ellas sin buscarlas..., fruto de la casualidad..., visitando alguna ciudad..., algún pueblecito..., alguna feria de anticuarios que tanto me gustan..., siempre voy buscando el tesoro del arca perdida..., y otras las hallo por ebay.

Espero que a las que os interesan este tipo de artículos, encontréis estos pequeños tesoros que tanto sabor tienen..., sin duda muy especiales para nosotras y por supuesto para las suaves manos que anteriormente los acariciaron...